Quique nació en Brasil pero con tan sólo 5 años se trasladó con su familia a España, donde trabaja en el negocio familiar de más de dos generaciones de pastelería y panadería.
Al contrario que sus compañeros, su pasión por las dos ruedas no le viene de familia, de hecho no eran muy promotos pero, a los 14 años, Quique descubrió su pasión por ellas y se despertaron en él ganas de disfrutar de la carretera y de los amigos que le acompañasen en sus rutas.
Su primera moto, una Sporster 883, se la compró sin que sus padres lo supieran y no fue hasta dos años después que lo hicieron. Por ese entonces se compró la segunda (en el año 96), su Blue Rose, una Road King Harley Davidson, su moto actual (“que tiene la misma edad que mi hija”) y de la que disfruta a diario.
Actualmente pertenece al Chapter Madrid (club de Harley Davidson), donde entró en el año 94. Llegó a ser incluso su director durante más de 5 años en los que creó y fomentó una de las quedadas moteras más famosas de Madrid.
¿Por qué te uniste a la #ECCervezaSINGira18 y cuál crees que es la parte más positiva de ser uno de sus embajadores?
Quique nos cuenta: “cuando conocí el desarrollo de esta gira hace 5 años, la verdad que me cautivó, amigos, carretera, km, conocer España y sobre todo lo que se hacía: recordar que la cerveza SIN es una alternativa segura si se tiene previsto conducir”.
Está convencido de que esta gira es un buen trabajo con increíbles resultados. Además resalta que la parte más positiva es el contacto con la gente, “lo que transmitimos a las personas que vamos conociendo, no paran de felicitarnos por nuestra labor”.
¿Cómo estás viviendo esta experiencia hasta el momento? ¿Qué esperas de esta gira?
Para Quique esta experiencia está siendo única ya que es como su sueño de infancia hecho realidad. Con una sonrisa nos confiesa que nunca creyó que sería posible pero hoy nos acompaña junto a Ramón Pradera, Victor Rider, Soto y Mateo en cada jornada de la #ECCervezaSINGira18.
