Cada vez hay más gente que compra coches pensados para conducir en otras superficies fuera de la carretera. Tienen más altura, más protecciones, neumáticos especiales, refuerzos y una electrónica diseñada para optimizar los recursos del vehículo cuando rueda por superficies complicadas. Hoy en SIN Riders queremos enseñaros cómo se puede sacar el máximo partido a toda esta equipación, y además, explicaros para que sirve y si realmente se nota cuando lo usamos.
En definitiva, saber cómo se han de conducir estas máquinas. Para esta “master class” hemos podido contar con Jaime Sornosa, uno de los mejores pilotos que hay en España. Le hemos puesto a los mandos del 4×4 más pequeño en tamaño que hemos encontrado: el Panda Cross.
Jaime Sornosa, también conocido como “Correcaminos”, es un piloto todoterreno que ha probado todo tipo de vehículos.”. Empezó a competir en 1966 y ha estado 45 años en activo. Tiene un palmarés infinito con numerosos campeonatos Europeos y nacionales, y ahora, ha volcado todos sus conocimientos en el Centro de Perfeccionamiento de Bercimuel, en Segovia. Se trata de un complejo deportivo dedicado al mundo del motor en el que se puede llevar al límite cualquier vehículo manteniendo en todo momento las medidas de seguridad. Su pista de 4×4 está considerada como una de las mejores (si no la mejor) que podemos encontrar en España, con 16 pruebas de lo más variadas.
En sus manos ponemos el Panda Cross , el mejor preparado de toda su gama para enfrentarse a cualquier tipo de terreno. De momento ya vemos que su aspecto exterior está especialmente reforzado, la suspensión se ha mejorado, se ha elevado su altura 16 centímetros, y además, calza unas llantas más grandes y unos neumáticos especiales para tierra. Por otro lado, su ángulo de ataque es más efectivo. Nos disponemos a sacarle todo el provecho en las manos de “Correcaminos”, no sin antes, activar toda la electrónica que lleva para situaciones extremas: Bloqueo Electrónico del diferencial, transmisión a la demanda y control de estabilidad.
Para la primera prueba, el vadeo de un río. Jaime nos aconseja que hay que pasarlo despacio para no provocar una ola que pueda volver contra nosotros y crearnos problemas. Continuamos por un terrero con el plano inclinado, donde es importante saber reaccionar. Si no giramos las ruedas hacia la cima, el coche volcará con total seguridad.
Llega el momento de poner a prueba el control de descenso electrónico ya que nos queremos lanzar por una cuesta de tierra muy empinada. En este tipo de casos, es importante no tocar el freno y simplemente soltar el embrague para dejar que la electrónica trabaje y, de este modo, tener una bajada dominada.
Ya por último Jaime nos sugiere una serie de recomendaciones, como mantener el gas siempre suave y controlado, nunca llevar los pulgares por dentro del volante (se pueden partir si los llevamos por dentro y una rueda pilla un obstáculo brusco) y, siempre que sea necesario, bajarse del coche para inspeccionar el terreno y estar seguros de todos los sitios por los que pasamos.
Con estos consejos y esta mecánica, nos aseguraremos un éxito total.