
Si eres de los que dejan las compras de Reyes para el último momento, aún estás a tiempo. Si por el contrario, eres más previsor y ya tienes cubierto el cupo, tienes las rebajas a la vuelta de la esquina para aprovechar y hacer unas compras muy moteras. Muchos no estaréis familiarizados con el sector del motor, por lo que a veces os resultará complicado enfrentaros a este tipo de situaciones y saber cuál es la mejor opción. Si es vuestro caso, prestad atención a nuestras sugerencias e ideas moteras para acertar de lleno o darte un capricho, tanto si sois expertos como principiantes.
1. Comenzamos por lo básico: el equipamiento. Y es que siempre se acierta con una buena chaqueta, pantalón o cualquier ropa térmica para las frías rutas de invierno. Hay que tener en cuenta que existen dos tipos de tejidos: la cordura, un tejido de nailon muy resistente, y el cuero, este último un poco más complicado de regalar debido a la talla, la comodidad y su estilo personalizado. La cordura, además de tener un precio un poco más asequible, nos ofrece muchas más posibilidades, como por ejemplo, su combinación con otros materiales. Debemos asegurarnos de que la prenda elegida tiene un nivel de 500-600D, ya que nos protegerá más eficazmente ante una caída. Por último, comprobad que las protecciones sean las correctas: en las chaquetas, deberán ser rígidas en hombros y codos, y en la zona del pecho, deberá serlo en la espalda. En el caso de los pantalones, las zonas protegidas deberán ser las rodillas, el trasero y los muslos. Además, para rodar en circunstancias de clima adverso, resulta indispensable llevar ropa térmica y traje de agua. Junto a la ropa especial para climas muy fríos, utilizar licras o mallas para el invierno es un factor a tener en cuenta, pues al conducir la sensación térmica es siempre mayor. Si vas a rodar con lluvia, lo ideal sería llevar un mono de agua, un traje ligero completamente impermeable que se coloca sobre la ropa.
2. En cuanto a los complementos, puedes elegir entre un casco (puedes encontrar información sobre este tema aquí),un sotocasco o braga de cuello para protegernos del frío exterior o guantes (preferiblemente largos para evitar que la lluvia y el frío se cuele entre la chaqueta y el guante y esta congele nuestras muñecas durante los meses de invierno). También puedes regalar unas gafas, aunque eso sí, deben ser ligeras y la patilla no debe ser especialmente ancha, para que las podamos poner con el casco en caso de que este no venga adaptado para ello. Además, sería conveniente que las gafas fueran polarizadas para evitar reflejos. Por último, no podemos olvidarnos de la ropa reflectante, que debería estar incluida en nuestra chaqueta y pantalón así como en un sinfín de prendas o unas imprescindibles botas, desde las más urbanas que casi parecen zapatillas, hasta las más profesionales, y por ende, más aconsejables para grandes trayectos. Lo esencial a la hora de elegirlas es que sean duras e impermeables y que tengan una buena protección.
Si conoces bien el mundo de la moto, también puedes aventurarte a regalar algo de equipamiento para el vehículo. Hay mucho donde elegir: maletas, alforjas o top-case, mochilas, sobredepósito o perneras. Sin embargo, ten en cuenta que además de tener un precio un poco más alto por lo general, en estos casos habría que tener en cuenta el uso y el modelo de moto que tenga la persona a la que vamos a regalar. Eso sí, siempre será un acierto el regalar una mochila pernera o un sobredepósito, especialmente útil para llevar la documentación, el móvil o la cartera. También puedes decantarte por una manta o unas manoplas, que aunque estén pensadas para scooters de uso urbano, se trata de un regalo muy práctico para las frías mañanas de camino al trabajo. Por último, siempre puedes decantarte por regalar herramientas para la moto, que aunque casi todas traen un pequeño kit, resulta un regalo muy útil pues muchas veces no tenemos suficientes o estas no son de buena calidad. Un pequeño y completo maletín de herramientas para usarlas durante nuestras rutas es una elección ideal.
Si no te convence esta selección todavía tenemos unas cuantas ideas más generales como por ejemplo una cinta adhesiva reflectante para las llantas, un botiquín, unas bandas de calor para el guante, fundas para la moto, un kit repara-pinchazos, un medidor de presión de las ruedas o un GPS con su soporte.
Las posibilidades son infinitas. Y seguro que, ya sea un regalo para una persona especial o un complemento para ti mismo, acertarás.