Desde En la carretera, cerveza SIN os presentamos una ruta en bicicleta que no dejará indiferente a nadie. Esta ruta va a recorrer uno de los valles más conocidos de España, el del Jerte, en Cáceres. Partiremos desde el pequeño pueblo de Navaconcejo y subiremos hasta las Gargantas del Infierno que, pese a su nombre, no debe intimidar a nadie, porque se trata de un recorrido asequible para todos los públicos. Además, amenizaremos los 33,4 kilómetros de trayecto con una cervecita SIN en cada parada, porque ya sabéis que cuando estamos en carretera, al frente de cualquier tipo de vehículo, el alcohol no tiene cabida.
Como decíamos, arrancaremos nuestra ruta en la localidad de Navaconcejo, característica por su puente y cruz de la época romana, entre otros muchos encantos. Si seguimos la senda trazada por el río Jerte, por el sendero de las cascadas de las Nogaledas, el siguiente pueblo que nos encontraremos en nuestra ascensión será Cabezuela del Valle. Para alcanzar este punto rodaremos por caminos de tierra coronados de arboledas, que bien merecen la escapada. Uno de esos lugares donde podemos hacer una de esas fotos que nos acompañen toda la vida.
Ya en Cabezuela podemos admirar su puente y calzada romana. Hay que destacar que esta zona del Jerte es rica en patrimonio románico y destaca por su gastronomía local, ideal para maridar con una cerveza SIN.
Proseguimos nuestro camino por la ruta de la Umbría, en la que atravesamos un robledal y rodamos sobre pistas cementadas y de tierra. Esta subida es algo más costosa, pero nada que no pueda sobrellevar cualquier persona que se lo proponga. Terminada la ascensión llegaremos a la zona de los Pilones, una “garganta” en forma de pequeña cascada cuyo caudal desciende desde las montañas dejando una estampa realmente bonita. Eso sí, si el agua está muy fría, es recomendable posponer el baño, pero en cualquier caso el enclave es ideal para reponer energías y deleitarse con el escenario natural.
Un manto de flores blancas… y una cerveza
Tras el descanso, continuaremos por la ruta de “La Vuelta de las Gargantas del Infierno” donde, si coincidimos con la época del cerezo en flor, es obligado hacer una parada para disfrutar de las vistas del valle recubierto con un manto de flores blancas o rosadas. Retomando esta senda llegaremos al puente y refugio de Sacristán.
En el puente cambiaremos de vertiente del río y dejaremos el sendero de las Gargantas para continuar subiendo hasta el Collado de las Losas. Aquí cogemos el camino de Carlos V, cuyo cuerpo descansa en el Monasterio de Yuste. Esta parte será la parte más llevadera al tratarse de un continuo descenso de retorno hasta Navaconcejo, punto en el que habremos completado los 33 kilómetros previstos inicialmente.
Se trata de una de las rutas más bonitas que se pueden hacer en bicicleta por Extremadura. Especialmente recomendable entre finales de marzo y principios de abril para ver la floración del cerezo, pero sin duda un gran plan para todo el año.