Dentro de poco empezarán a caer los primeros copos de nieve en algunos puntos de la península y eso significa que, poco a poco, nos va acechando el invierno. Para que empiece a nevar la temperatura tiene que ser de 0ºC o inferior, lo que produce unos pequeños cristales de hielo a consecuencia de la congelación de partículas de agua en suspensión en la atmósfera que se van agrupando.
Es un fenómeno increíble y que a todos nos encanta, pero hay que tener cierto cuidado cuando se combina con la carretera. Cuando las vías están sepultadas bajo un manto blanco helado, se torna más fácil maniobrar sobre dos que sobre cuatro ruedas. Por ello, traemos algunas curiosidades y consejos para conducir en moto por la nieve para que puedas seguir de ruta acompañado de una cerveza SIN, con familiares o amigos y disfrutando de paisajes níveos característicos de invierno.
Está claro que, para este tipo de climatología, lo más importante es estar correctamente preparado: una indumentaria que nos proteja de las temperaturas extremas, una adecuada y total revisión de la moto, además, la conducción tiene que ser más bien pausada, con distancia prudencial y relajación corporal. Hay que intentar, en la medida de lo posible; circular sobre un carril que ya esté abierto y siempre llevar el pie con la punta sobre el pedal para poder dirigir correctamente la moto en la dirección que busques.
Habría que señalar que la existencia de neumáticos específicos de nieve para motos no suele abundar en el mercado, por lo que algunos suelen colocar cadenas a las ruedas traseras e incluso bridas de plástico para ganar un poco de tracción, pero la realidad es que en los sitios de grandes y frecuentes nevadas, se suelen utilizar clavos y pinchos sobre las ruedas que proporciona el control deseado.
Desde luego, lo más importante es ser consciente de que existen adversidades importantes que pueden provocar accidentes, por lo que lo mejor es tener control, ir despacio para disfrutar de la ruta que elijas al máximo.
